por Luciano García
u otros

(Intromisión)

“la esquicia producida por el pólemos debe asimismo reunir, ayuntar, coyuntar, aliar, conjugar, mantener junto lo que ella separa o espacia”


Somos a la China lo mismo que el habla a Europa.


 


El pasillo en la Academia (con esto me refiero al lugar donde deambulaba Platón, al lugar donde circula el platonismo enunciado, invertido ininvertido o lo que fuere; pero explícito) es el único lugar concedido al reírse de Hegel. ¿O acaso se ríe en general, y de Hegel inclusive, en los congresos y en las aulas? Advertidos, muchos como nosotros, de que es desde hace décadas francamente –francesamente- filosófico reírse, sindican impunemente que lo hacen, que lo están haciendo; pero esa risa –de calavera, ominosa– es de temer. Es la risa seria, como se sabe, de la cruza del búho con la hiena, que da una suerte de mula o macana desagradable. Desconfía amigo de un filósofo chocarrero así como de aquellos que falan de la risa con el entrecejo adusto del examinador con férula escondida. Reír ha de reírse en el Circo no allí, y desconfía, aunque te diga que desconfíes, de nosotros, quienes por izar el banderín de Gombrowicz, damos Circo y Filosofía no en mayor cantidad pero sí confesamente.








Demasiado tilingo para ser filósofo, mi madre decidió ser mujer.








ARENGA A LOS AUTISTAS


“Si hay filosofía sólo hace una cosa: expeler utopías para consumo de los infantes. El platonismo invertido, inclusive, es el penúltimo de los cándidos cuentitos de las buenas noches con que pa me dormía anteayer”
Rolo Puente








EL LUGARTENIENTE DEL ÚTERO


Filosofía es estilo: convencer a la pared.